© Serie "Monólogos musicales" - Ára Bátur - Sigur Ros- Pastel sobre cartulina, Natalia Castillo, 2009
Cerré los ojos y lo escuché.Entró en la habitación y caminó hacia mí, se acercó y me susurró al oído.
Su voz se instaló en mis vísceras, me llevó, me elevó, cada vez más,
un metro más, otro y otro…
me ayudó a liberar mis lágrimas
(caudalosos ríos heridos)
del tiempo, del olvido, de la ausencia.
>Me llevó al cielo con su voz y hoy me lanzó al vacío<
Con su nombre aún atrapado en mis labios
(tumba que yace en mi boca)
y las letras de su canción bailando en mi cabeza,
perdidas.
Detrás de las palabras vacías siempre hay algo, pero nadie lo ve.
(la tristeza, el miedo, la ansiedad, la melancolía)
Han pasado los días,
está por terminar de esculpir mi muerte y,
de nuevo,
lágrimas agotan mis mejillas,
(incisiones por las que me deshago de la vida).
Y se me acaba el tiempo...
Cae la gota que desborda el río,
dibuja mi último movimiento y me consume.
He terminado de caer,
él se cura y yo me ahogo,
finalmente…
Finalmente estoy en casa.
http://www.youtube.com/watch?v=NecFN-cfwlk&feature=player_embedded#
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